Caos

Se me corta la respiración, me cuesta tomar aire, me quema los pulmones... me preocupo, me rayo, le doy mil vueltas a las cosas y no sé capaz de llegar a una conclusión, ¿por qué no lo entiendo?
Llevo un bote de felicidad colgado de un hombro por si necesito pintar mi rostro con ella, pero conforme más la uso, antes se va. Ando perdida porque mi brújula se estropeó, y mi orientación no es suficiente para guiarme, solo consigue llevarme a callejones sin salida y a caminos que no llevan a ninguna parte. Los recuerdos tampoco ayudan, entorpecen, se meten de por medio y se desbordan, difuminando todo lo que me rodea.
¿Qué es? ¿Es sueño o acaso realidad? Es una realidad que se convirtió en fantasía de la que ya solo quedan los restos usados y destrozados. Cuando una estrella explota en el espacio se convierte en un agujero negro que todo lo absorbe, opino que eso también sucede con las personas: estrellas brillantes que revientan por dentro y se convierten en un mar de oscuridad que lo engulle todo a su paso.
Ya no sé bien lo que quiero decir, ni siquiera si quiero decir algo, ¿es posible hablar sin expresar nada? Sí y no, supongo que siempre se revela una parte de nosotros mismos con cada palabra que pronunciamos, a veces más y otras menos, aunque eso no significa que lo entendamos.
¿Quién quiere un orden cuando el caos es tan natural? Cuanto más caótico más sentido adquieren las cosas para mí, cuando dejo de buscar un orden a mis pensamientos y dejo que fluyan sin más, es cuando más lógica adquieren.